¿Cuál es la progresión ideal en moto?

Una pregunta frecuente, la respuesta a la cual parece de sentido común, pero no siempre lo es ya que, en ocasiones, nos encontramos con clientes que buscan una moto de alta cilindrada como primera moto, sin o con muy poca experiencia al manillar.

Las motos y la velocidad son una fuente indiscutible de placer, pero a su vez pueden convertirse en una pesadilla si no escogemos la moto que mejor se adecue a nuestras capacidades de ese momento en el tiempo.

A pesar de que el permiso A2 solucionó en gran parte esta situación, ya que no permite conducir motos con una potencia superior a los 35 kw o 96 cv, nos encontramos casos de personas que consiguieron el carnet hace años pero nunca llegaron a conducir una moto (por ejemplo, por querer esperar al carnet A y así ahorrarse comprar una moto de iniciación en muchos casos).

Aunque somos conscientes de que las motos son un juguete caro y que la mayoría de nosotros no podemos comprar una moto cada año, es importante que, especialmente cuando estamos empezando, seamos conscientes de las implicaciones que tienen el peso y la potencia en la conducción de la moto y de que escojamos las primeras motos con la cabeza más que con el corazón. De esta forma, el proceso de aprendizaje será más rápido y seguro, y antes llegaremos a conseguir el dominio y el conocimiento que necesitamos encima de la moto para poder escoger la definitiva con el corazón.

No debemos olvidar que una moto de alta cilindrada o de corte deportivo requiere una buena base previa ya que, de lo contrario, nos faltaran muchas capacidades que con estas motos no llegaremos a adquirir por las limitaciones que presentan.

Si bien lo ideal sería siempre estrenar moto, por las ventajas que tiene el hecho de que sea nueva (por ejemplo la garantía) y saber que no ha sido maltratada, una buena opción, especialmente cuando estamos aprendiendo, es adquirir una moto de segunda mano en un establecimiento profesional que también nos ofrecerá una garantía legal sobre el vehículo (a pesar de que será inferior que si este fuera nuevo). Las caídas a poca velocidad o incluso en parado son frecuentes cuando estamos aprendiendo, y en una moto nueva generalmente nos da más miedo que esto pase porque cuesta más dinero.

Así, ¿cuál sería la progresión ideal para aprender de una forma segura y eficaz?

Realmente, lo ideal sería pasar por casi todas las cilindradas para ir escalando de la forma más progresiva posible. En cada cilindrada adquiriremos diferentes habilidades y mejoraremos nuestra confianza encima de la moto.

Aún así, si hemos empezado en edad adulta, las cilindradas más pequeñas de 49 cc y 125 cc se nos quedaran justas en determinados momentos (por ejemplo, si realizamos trayectos por autovía para ir a trabajar).

En este caso, una buena opción para iniciarnos la encontramos en la gama de 500cc, que nos ofrecerán potencia suficiente para todas las situaciones cuotidianas, pero con una entrega muy suave y progresiva, que nos permitirá desarrollar un buen tacto de gas y de frenos sin peligro.

Otra alternativa la encontramos en la gama de modelos limitables para el carnet A2, que a su vez, nos servirá para reestrenar moto en el momento en el que pasemos al carnet A y podamos deslimitarla para disfrutar de la potencia máxima de una moto que ya nos resultará familiar.

Como conclusión, lo que nunca debemos hacer es pretender iniciarnos con una moto de alta cilindrada, y en caso de duda, dejarnos asesorar por los profesionales que encontrareis en nuestros concesionarios.